La Comisión de Medio Ambiente y Recursos Naturales de la Cámara aprobó en general, por 6 votos a favor, 2 en contra y 3 abstenciones, el proyecto de ley que regula el proceso de transición socioecológica justa hacia la carbono neutralidad. Adicionalmente, la iniciativa (boletín 15147) modifica la Ley 19.300, sobre Bases Generales del Medio Ambiente.
El texto considera regular el citado proceso de transición en el marco de los compromisos de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero. Así, también, respecto de la protección de sumideros y ecosistemas.
La idea es que se desarrolle de manera justa y equitativa, abordando los ciclos de producción y consumo. Además, considerando las necesidades socioecológicas de las comunidades, localidades y grupos vulnerables que le conforman.
Define la transición socioecológica justa como el proceso por el cual los diversos actores y sectores de la sociedad acuerdan una vía para dar término a una actividad contaminante, transformarla y/o crear nuevas actividades económicas.
De tal modo, se realizará una transición a un estado mejor, en que se apliquen medidas sociales, ambientales, energéticas y económicas. Ello incluiría acciones de mitigación y adaptación al cambio climático, como también para preservar, restaurar y/o reparar ecosistemas.
Ejecutivo
En la sesión expuso el subsecretario del Trabajo, Giorgio Boccardo. Señaló que el proyecto establece los principios de planificación y descentralización; preparación y remediación. También, equidad, democratización, soberanía y autodeterminación potencial para la transformación socioecológica. Asimismo, incorpora la transversalización de género en todo el proceso.
Acotó que, cuando uno considera las transiciones justas, siempre debe considerar tres niveles. En primer lugar, los trabajadores que están empleados en la empresa mandante. Después, los trabajadores contratistas. Finalmente, las comunidades locales y la economía de servicio asociada a esas transiciones.
El subsecretario indicó que en cualquier definición de transición las nociones de trabajo decente, tripartismo y diálogo social son fundamentales, pues son un pilar primordial para todas las transiciones justas.
Informó que, durante el periodo 2022 a 2025, tienen considerado el cierre de 13 centrales o matrices que van a producir un tipo de tensión en las comunidades. “Nosotros ya tenemos un plan para ir a enfrentar este tipo de situaciones”, alertó.
“Una transición justa implica la no expulsión de personas del mercado laboral y el bienestar económico. Estas transiciones no pueden dejar grupos rezagados “, remarcó.
Boccardo sostuvo que, como ministerio, han incorporado políticas de intermediación laboral activa, de capacitación y certificación de competencias laborales que apuntan a la reconversión.
Sociedad civil
La instancia legislativa también recibió la exposición de Karen Pradenas, arquitecta e integrante de la Sociedad Civil por la Acción Climática. Señaló que celebran la tramitación de esta ley.
Estimó que otorga un marco integral para abordar la problemática de la crisis climática, incorporando la adaptación. Destacó, que “se hace cargo de la transición justa, la cual, al día de hoy, ha sido abordada de forma parcial y sectorial”.
Pradenas resaltó que se incorporará el principio de género. Sin embargo, consideró que aún hace falta una mayor incorporación de temáticas en la ley “para que realmente se pueda considerar un pilar fundamental en la problemática de género”.
“Es importante que se mencione en la ley que la transición socioecológica justa debe basarse en un modelo que proponga la centralidad de la sostenibilidad de la vida hacia nuevas lógicas de consumo y producción, resguardando aquellos bienes comunes que son esenciales”, precisó.
Además, planteó que debe incorporarse la economía del cuidado. “Todos los trabajos relacionados con el mantenimiento de la vida y de la fuerza de trabajo remunerado. Asimismo, una transversalización de la dimensión de género en toda la ley”, comentó.