Fomentar la filantropía y apoyar a las organizaciones de la sociedad civil sin fines de lucro es el objetivo del proyecto (boletín 14486) que crea un nuevo régimen de donaciones con beneficios tributarios.
La iniciativa, propuesta por el Gobierno y despachada al Senado, funcionará como una vía adicional para efectuar y recibir aportes de manera sencilla, expedita y transparente, ampliando los fines susceptibles de donación.
El proyecto, informado por el diputado Daniel Núñez (PC), incorpora sectores como desarrollo social y comunitario, salud, educación, cultura, deporte, diversidad y equidad de género, protección infantil y familiar, culto, medio ambiente, pueblos indígenas, migrantes, fortalecimiento de la democracia y derechos humanos, entre otros.
También simplifica el proceso de donaciones y avanza en transparencia. De igual modo, promueve el buen uso de las donaciones mediante la creación de un portal digital público. Este mantendrá información de los flujos realizados con ellas.
Además, aumenta los montos susceptibles de acogerse al beneficio tributario, sin que le afecte el límite global absoluto por donaciones establecido en otras leyes vigentes.
Donaciones
Podrán recibir donaciones las entidades sin fines de lucro que estén inscritas en el registro especial destinado para dicho efecto. En este marco se incorporan a los centros de formación técnica, hasta ahora excluidos.
Asimismo, se detalla que el registro mencionado estará a cargo de una nueva secretaría técnica dependiente del Ministerio de Hacienda.
Se especifica que los donantes podrán ser contribuyentes de primera categoría, pymes y contribuyentes del impuesto Global Complementario. También podrán participar contribuyentes del impuesto de Segunda Categoría y del impuesto Adicional. Sin embargo, se excluye a las empresas del Estado y a las municipalidades.
Beneficios tributarios
La norma señala que los bienes donados, valorizados a su costo tributario o de mercado, no estarán sujetos al trámite judicial de insinuación y no se afectarán con IVA, impuesto a las donaciones, derechos ni arancel alguno.
Los donantes de primera categoría podrán descontar hasta 20 mil UTM o el 5% de la base imponible, el 1,6 por mil del capital efectivo o el 4,8 por mil del capital propio tributario, según sea el caso. Los afectos al Global Complementario, por su parte, podrán deducir hasta 10 mil UTM o el 5% de su base imponible, el que fuere menor.
El exceso de donación no se aceptará como gasto ni podrá ser descontado de la base imponible. Sin embargo, tampoco será castigado como gasto rechazado.
En cuanto al gasto fiscal, se estima que la implementación del proyecto total llegaría a $182 millones, el primer año, y a $128 millones, en régimen.
En cuando a la exención de impuestos, generarán menores ingresos por $2.844 millones al año. El monto podría crecer de acuerdo con el comportamiento de los donantes.
Debate
En el debate en la Sala intervinieron los diputados de RN Frank Sauerbaum, Miguel Mellado y Francisco Eguiguren; de la DC Jorge Sabag, José Miguel Ortiz y Matías Walker; Evópoli Luciano Cruz-Coke; PC Daniel Núñez; PS Marcelo Schilling; independientes Bernardo Berger y Marcelo Díaz; y RD Giorgio Jackson.
Quienes se manifestaron a favor señalaron que la norma es un avance. Estimaron que permite un compromiso con nuevas causas. Además, valoraron que se facilite el proceso y los avances en transparencia.
También la/el ministra/o de Desarrollo Social, Kara Rubilar, y de Hacienda, Rodrigo Cerda, valoraron el avance de la norma.
Sin embargo, para el diputado Núñez este proyecto “consolida y avala el concepto de Estado subsidiario”, que va en contra de la motivación del proceso constituyente. Además, facilitaría la elusión tributaria.
Por su parte, el diputado Giorgio Jackson (RD) consideró que “esta ley de donaciones pone el foco en la dirección opuesta”. Ello, porque le quitaría poder el Servicio de Impuestos Internos y no diferencia en las variadas naturalezas y motivaciones de las donaciones.
