Por 118 votos a favor, uno en contra y 32 abstenciones, la Sala de la Cámara aprobó la resolución 1136, que solicita al Presidente de la República designar, a la brevedad posible, un Delegado Presidencial para la salud mental nacional.
El texto, presentado a la Cámara por los diputados EVOP Sebastián Keitel, Sebastián Álvarez, Luciano Cruz-Coke, Pablo Kast y Andrés Molina, propone que dicho profesional articule todas las acciones en la materia, desde el Ministerio del Interior y Seguridad Pública o desde la Presidencia, y que trabaje en coordinación interministerial, con especial énfasis en las repercusiones de la emergencia sanitaria.
Lo anterior, considerando que la atención de salud mental de niños, niñas y adolescentes presenta importantes brechas en todos los niveles, especialmente en la especialidad ambulatoria, tensionando las redes de salud con otros sectores como el de protección de la infancia, educación y tribunales para lograr una resolución más oportuna.
Asimismo, agrega el documento, existe también una importante brecha de plazas de hospital de día tanto para adultos como para población infanto-adolescente. Por ello, se estima fundamental privilegiar el financiamiento de programas de salud mental para grupos críticos.
En este contexto, la resolución plantea que la prevención y tratamiento de las enfermedades mentales se desarrolla a través de diversas áreas, que van desde el desarrollo y fortalecimiento de factores protectores de la salud mental, como lo serían las vías de apoyo para que las familias puedan desarrollar un ambiente adecuado para criar a sus hijos libres de estrés tóxico, hasta el acceso y facilidades que tienen los enfermos para ser diagnosticados y seguir con los tratamientos prescritos.
Foto: Engin Akyurt